Método

Lo primero que vamos a hacer es calentar un litro de leche en un cazo. En otro recipiente, ponemos 100g de mantequilla y la derretimos. Después cuando tengamos derretida la mantequilla echamos los 100g de harina y mezclamos bien. Cocemos bien la harina durante dos o tres minutos porque si no va a saber a crudo y no va a estar buena. Sacamos la cazuela del fuego.
Ahora echamos el litro de leche caliente, echamos una cucharada de nuez moscada, dos cucharadas de perejil y el queso cabrales. Removemos para mezclarlo bien para que se disuelva la harina con la leche. Llevamos la cazuela al fuego y no dejamos de removerlo durante 3 o 4 minutos. Veréis como espesa.
Después cuando se enfrié la bechamel, la metemos en la nevera hasta el día siguiente.
Cogemos la bechamel, hacemos la forma de las croquetas y hacemos los pasos siguientes:
Harinamos, después pasamos por el huevo y por ultimo por el pan rallado.
Lo llevamos a la freidora y cuando tengamos el aceite caliente, metemos las croquetas y dejamos que se doren.
Tendremos unas croquetas delicatessen.